Programa de WWF para la conservación de los bosques

Promovemos el consumo legal y responsable de productos forestales (madera, papel, corcho, resina…).Todos ellos más ecológicos, por ser almacén de CO2, por el bajo coste energético asociado a su producción y transformación, por ser reciclables, reutilizables y revalorizables energéticamente al final de su ciclo de vida. En un contexto de crisis ambiental es esencial impulsar el uso de la madera como material en construcción y decoración frente a otros materiales mucho más contaminantes (aluminio o plásticos), pero apostando por aquellos procedentes de la gestión responsable de bosques y avalados por sistemas de certificación forestal...

En España, los bosques apenas ocupan el 29% de la superficie que podrían ocupar, y la mayoría no se encuentran en buen estado. A escala global, hemos perdido 2/3 de los bosques en 10.000 años. Seguimos perdiendo bosque mediante talas ilegales o transformación para cultivos intensivos, como el aceite de palma. Para WWF restaurar significa ayudar a la naturaleza a regenerarse por sí misma, de un modo integral.

En España somos buenos apagando incendios: el 65% de los incendios son extinguidos en fase de conato (menos de 1 hectárea). Sin embargo, no lo somos evitando que se produzcan ya que no se invierte en dar vida a los montes para así evitar que ardan. Llevamos años alertando de que los bosques son "bombas de relojería". Los incendios de 6ª generación ya están aquí. Sólo la prevención podrá evitar que los incendios sean tan devastadores.

La lógica de trabajar a "escala paisaje" nos anima a ir más allá de los límites geográficos (más allá de "mi parcela o finca") e individuales (mirar más allá de mis intereses personales) a la hora de entender los usos del suelo para encontrar acuerdos que favorezcan a una mayoría. Un enfoque integrado del paisaje ayuda a conciliar los objetivos, a veces contrapuestos, de desarrollo económico y sostenibilidad ambiental.