Agua: Inventario de humedales de Baleares

El estado de conservación de los humedales de las Islas Baleares es desigual dependiendo principalmente de su tamaño y de si es propiedad pública o privada. Las grandes zonas húmedas han sido declaradas espacio natural protegido, la mayoría tras largas reivindicaciones ecologistas. Por el contrario, las zonas húmedas menores están muy lejos de tener asegurado su futuro. Aunque las figuras de protección desde el punto de vista urbanístico y el deslinde del Dominio Público Marítimo Terrestre han contribuido, más de lo que cabría esperar, a evitar su total destrucción.

La planificación hidrológica cuenta también con un catálogo de Zonas Húmedas bastante completo, que incluye algunas áreas artificiales, pero en el que aún se deberían incluir algunas zonas naturales de especial valor, como el Prat del Port d'Andratx en Mallorca o el Canal de Cala Saona en Formentera.

Tenemos que cuidar nuestros humedales, por muy pequeños que sean, dado que su valor es enorme 

Las zonas húmedas, sobre todo en un entorno mediterráneo, tienen un extraordinario valor para la vida y para el funcionamiento de los ecosistemas: constituyen reservas de hábitats, almacenan carbono, mantienen el caudal, filtran nutrientes y mantienen la calidad de las aguas, acogen polinizadores naturales, modulan el clima, preservan el paisaje, y son un recurso para el turismo de naturaleza y actividades al aire libre.

 En el marco de este trabajo, en 2016 y 2017, llevamos a cabo el inventario de zonas húmedas en las Islas Baleares; talleres participativos con sectores relevantes y se ha promovido la restauración de varias zonas húmedas. También mantuvimos contactos y reuniones con las autoridades ambientales e hídricas de las Baleares y hemos denunciado afecciones a zonas húmedas detectadas durante el trabajo de campo. 

Conclusiones del estudio humedales de Baleares: 

• En Baleares, dos tercios de los humedales son de menos de 2 hectáreas. Son los de pequeño tamaño los menos protegidos. Por ejemplo son pequeños humedales que en verano se convierten en "aparcamiento" junto a las playas, lo que acaban suponiendo su destrucción. Se cuenta con poca información sobre ellos, muchos no cuentan con figuras específicas de protección y se destruyen con facilidad sin que las autoridades competentes sean conscientes. Ejemplo de pequeño humedal costero utilizado como aparcamiento en Ibiza en la desembocadura Del Torrent.

• La mayoría son artificiales (83%): balsas de campos de golf, ‘safareigs’, balsas de depuradora, canteras o extracciones de arcilla, que suponen un importante atractivo para la fauna sobre todo si sus orillas se han naturalizado y aparece vegetación acuática.

• Un 17% son naturales, de los cuales, la gran mayoría corresponden a pequeñas balsas de desembocadura, que se convierten en pequeños puertos seguros para muchas aves migratorias, zonas de cría de anfibios e insectos como libélulas.​

• Un 40% de los humedales naturales de las Islas Baleares tiene más de la mitad de sus hábitats originales alterados. Cinco lugares están totalmente transformados. Casi todos son espacios sin protección, con la excepción del Salobrar de Campos y la Albufera des Grau, que son Parque Natural. Un total de 25 espacios han sido destruidos en los últimos 20 años.

• Casi todos los humedales son costeros, los más sensibles, ya que se ven afectados por el urbanismo. 

• Un 60% de los humedales naturales aún conservan más de la mitad de sus hábitats y forma del terreno originales, incluso 24 de estos humedales se puede decir que están intactos, sin signos de alteraciones humanas -la mayoría son masas de agua kársticas en cuevas, junto con cinco áreas poco frecuentadas-.

​Las soluciones pueden ser sencillas y económicas, como el vallado, señalización o acondicionamiento de pasarelas. Por ejemplo: Balsa de sa Mesquida (Maó) con una pasarela acondicionada por la semarcación de xostas para el tramo del Camí de Cavalls, una ruta que da la vuelta a la isla por el litoral y que es muy frecuentada por ciclistas, jinetes, corredores y excursionistas.

Propuestas de WWF para la ​rotección de humedales

• Promulgar un Decreto balear de protección de zonas húmedas

• Completar el catálogo de Zonas Húmedas del Plan Hidrológico e incluirlo en el Inventario Nacional de Humedales

• Más actuaciones de protección del hábitat de la Demarcación de Costas de las Islas Baleares en otras zonas como Cala Pi (Mallorca) o la Desembocadura des Torrent des Figueral (Ibiza).

• Involucrar a particulares y a otros sectores en la protección y gestión de las zonas húmedas, por ejemplo sectores como campos de golf, canteras y extracciones de arcilla o depuradoras.

• Aumentar la vigilancia de manera coordinada entre las diferentes administraciones con competencias.

• Realizar acciones de limpieza, comunicación y divulgación.